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lunes, 30 de diciembre de 2013

TERRASSA CUNA DEL BALONCESTO EN ESPAÑA

Historia del baloncesto en Terrassa

Los hechos que se detallan pertenecen al libro “El Bàsquet a Terrassa, 75 anys d’Història” de Joaquim Verdaguer que el Archivo Tobella presentó en la Fiesta de Sant Jordi de 1992, junto con la historia de todos los equipos y todas las temporadas, sus jugadores y los hitos importantes de este deporte en nuestra ciudad, ilustrado  con 150 fotografías y documentos  que acreditan Terrassa como ciudad origen del baloncesto en España.  
El baloncesto
El juego de la pelota y la canasta tiene su origen en Massachussets (EE.UU.) hacia 1891. Lo ideó James A. Naismilh, profesor de la escuela IYMCA Training de Springfield, especializada en la formación de entrenadores y educadores físicos.

La idea surgió de la necesidad de encontrar un deporte que pudiera practicarse a cubierto durante los largos días lluviosos y fríos del invierno, cuando el tiempo impide jugar los deportes habituales: atletismo, rugby, etc... Naismilh ensayó el fútbol sala y otros juegos, pero no dio resultado. Fue entonces cuando pensó en un nuevo deporte, el Basketball, que se jugaba con una pelota (“ball”) de fútbol, pero con las manos. La pelota se tenía que introducir en una canasta (“basket”). 

El juego fue un acierto y rápidamente se propagó por todo el país y, con el tiempo, llegó a Cuba y otros países sudamericanos. En Europa llegó con la primera guerra mundial, cuando lo practicaban los soldados americanos, pero parece ser que en 1902, en París ya se jugó un partido.
Terrassa, cuna del baloncesto español
La historia del baloncesto en España reseñada en enciclopedias y libros, marcaba el comienzo del baloncesto en 1922, con la llegada del Padre escolapio Eusebi Millàn, que, procedente de Cuba, lo introdujo entre sus alumnos del colegio de los Escolapios de Sant Antoni de Barcelona. 

Alumnos de la Escuela Vallparadís
Alumnos de la Escuela Vallparadís



Pero en 1986, dos estudiosos del Archivo Tobella de Terrassa, Pere Figueras y Joaquim Verdaguer, descubrieron en un diario local, en la “Crónica Social” del 4 de marzo del 1913, la siguiente noticia: “Bàsket-ball. En el campo Vallparadís dentro de poco los pequeños alumnos de la Escuela del mismo nombre  practicarán este nuevo deporte desconocido hasta hoy para nosotros”. Esta noticía daba pie a creer que nueve años antes de la introducción del Padre Miliàn ya se jugó a baloncesto. El periodista del semanario “Claxon”, Vicenç Batalla, buscó un alumno jugador de aquella época, el Sr. Josep Armengol y Gallo, que a sus 84 años confirmó la noticía.
Así lo corroboró el histoniador Josep M. Ainaud de Lasarte en una entrevista que mantuvo con Radio Terrassa. El director de la Escuela Vallparadís, Alexandre Galí, se lo había comentado tiempo atrás, y  queda constancia en la “Historia de las Instituciones y del Movimiento Cultural en Cataluña 1900-1936” que Galí escribió al volver del exilio. En el volumen décimo, página 188, encontramos: “Basketball. Aquest joc, nascut als Estats Units a la darreria del segle passat, va ésser donat a conèixer cap a l’any 1911 pel Sr. Eladi Homs. Nosaltres el viàrem aplicar a la nostra escola Vallparadís, de Terrassa, des de 1912, seguint el reglament del llibre ‘Les sports et jeux de l’Ecole’, d’Ern. Weber Garnier 1910”. 
Otro testigo que aporta luz a este hecho es el trabajo efectuado por el Instituto de Estudios Vallencs y el Ayuntamiento de Valls en “El Chicago que conoció Eladi Homs 1907-1910” y en “La Cronología Básica de Eladi Homs” de en Eloi Martínez Lanzas y en Josep Martí,  hacen mención de la interrelación existente entre Eladi Homs y el baloncesto. 

Para acabar de confirmar estos hechos, Maria Martorell, hija del subdirector de Ia Escuela Vallparadis, Artur Martorell, dirigió al Archivo Tobella unos documentos bastante definitivos. Eran fotocopias del dietario escolar de Alexandre Galí y del propio Artur Martorell donde pueden leerse las actividades pedagógicas del centro. Allí encontramos las siguientes anotaciones: “17 de gener 1913: anar per lo del basket”. “6 de febrer 1913: Reglament Basket”. “12 de febrer 1913: potser tindríem que refredar un xic el basket-ball perquè ara com son pocs no juguen bé i s’aburreixen i expressament fan faltes”. “24 de febrer 1913: demà amb la escusa de què plou treure les cistelles i basket i les arreglaré”. “26 de febrer 1913: he anat per les porteries, he arreglat els baskets”. 

Todo este conjunto de noticías y el documento demuestran bien claramente que en el año 1913 ya se jugaba a baloncesto en Terrassa, y que fue la primera población del Estado donde se practicó. 
Eladi Homs i Oller, 1886-1973
El año 1907 un maestro de 21 años, Eladi Homs, después de ejercer un breve periodo en el colegio Mont d'Or de Barcelona, fue becado por el Ayuntamiento de la Ciudad Condal para la búsqueda de nuevos sistemas pedagógicos y deportivos a los E.E.U.U. Sus estudios lo llevaron a Chicago, donde vio por primera vez un deporte bastante popular, el baloncesto, que se practicaba en las escuelas y universidades. Su estancia en América duró 3 años, y en el 1910 devolvía en Cataluña con un buen fajo de nuevas ideas pedagógicas. 

Eladi Homs, de entre sus actividades, colaboró con las escuelas Mont d'Or (ahora instalada en las afueras de Terrassa) y a la Escuela Vallparadís, dirigida por Alexandre Galí. En esta última, como ya hemos dicho, entre otros materias pedagógicas, se aplicó al baloncesto, según directrices de Eladi Homs, a pesar de que él no llegó a ejercer de maestro en el centro. A lo largo de su vida  innovadora en recursos pedagógicos, nunca más se dedicó al tema de la educación física o los deportes.  
La Escuela Vallparadís, 1910-1915
La creación de la Escuela Vallparadís tenemos que situarla en el marco de la renovación pedagógica catalana de principios de siglo. Como nos explica Paulina Pino de la Serra — L'Ambient Cultural en Terrassa 1877-1977, Caja de Ahorros de Terrassa 1979 —, la iniciativa surgió de un grupo de padres terrassensses preocupados por la educación de sus hijos. Se trataba de familias bienestantes interesadas en la cultura y en el resurgir del espíritu nacional catalán. En 1910, la Escuela empezó a funcionar, encargándose la dirección a un joven maestro, Alexandre Galí, que entonces ni siquiera estaba titulado. Pero el saber hacer de aquel hombre de 24 años se demostró pronto, creando una escuela que ha sido en muchos aspectos, un modelo. Los padres daban amplias libertades a los maestros para la educación de los niños, controlando la gestión administrativa desde el Patronato de Enseñanza de Terrassa. Galí ideó una escuela viva donde los niños no eran sometidos, donde no se los presionaba con premios y castigos sino que se les enseñaba a hacerse responsables de los propios actos. El catalán era el idioma empleado en la Escuela, y se instruía a los alumnos en la cultura, el folclore y la historia de nuestro país. Se daba una importancia notable a la formación física y manual de los niños, así como a los juegos y a la expresión corporal como vehículo de aprendizaje.

En cuanto a la formación física, se dio importancia a deportes innovadores y atractivos como el baloncesto, que se jugaba en el patio de la Escuela. Toda competición se efectuó dentro de su marco, puesto que no  hubieron competiciones con otras escuelas: jugaban entre los mismos escolares divididos en el equipo rojo y el equipo azul, pero acabaron suprimiendo este sistema porque había demasiada rivalidad, Al final se hicieron los equipos por sorteo. Uno de los detalles simpáticos a remarcar es que la red alrededor del aro no estaba agujereada y era el maestro el que tenía que sacar las pelotas de dentro después de cada punto. 

Por la Escuela Vallparadís pasaron pedagogos tan insignes como Artur Martorell, que fue uno de los animadores del baloncesto. 

La Escuela estaba instalada en los locales donde  había estado la Agrupación Regionalista y, últimamente, el Épic, en la calle Sant Antoni, en ell mismo lugar donde hoy hay un parking. 

Varias circunstancias, totalmente ajenas al funcionamiento pedagógico de la entidad, condujeron al cierre de la Escuela en el 1915, y con ella, se perdió el baloncesto.
El Padre Millàn
Después del cierre de la Escuela Vallparadís, Alexandre Galí se incorporó a una escuela de Barcelona, y Artur Martorell a una de Badalona, pero no se tienen noticias que difundieran el baloncesto entre sus alumnos. Tampoco Eladi Homs, en su cronología básica, menciona que volviera a asesorar alguna escuela más para la práctica del baloncesto. Los alumnos de Ia Escuela Vallparadís, que podrían haber sido la semilla del nuevo deporte, fueron a parar a otras escuelas donde no se practicaba ningún deporte, y por lo tanto el baloncesto quedó borrado. De su práctica no se  tiene otra noticia hasta el año 1922, en que, acontece la introducción definitiva, cuando el Padre escolapio Eusebi Millàn, procedente de Cuba, donde lo aprendió, lo puso en práctica entre sus alumnos del Colegio de Sant Antoni de Barcelona, El Padre Millàn suficiente trabajo tuvo para organizar un equipo entre sus discípulos, que preferían el fútbol. Al fin, se pudo organizar un torneo entre doce equipos de la misma escuela. Observadores de aquel torneo fueron algunos componentes de la Asociación de Antiguos Alumnos de la Escuela, que quisieron asimilar este deporte creando un equipo: El Laietà Bàsket-Ball Club. Esto ocurría en abril del 1922.

Todo fue muy rápido: el 8 de diciembre de aquel mismo año se jugaba el primer partido serio de baloncesto en España entre el Laietà y otro equipo fundado últimamente el Europa. El año siguiente, el 1923, ya eran unos cuántos equipos más: Laietà, Europa, Patrie, Barcelona, Espanyol, Cataluña, La France y la American Stars. Todos ellos, al mes de abril, empezaron el primer “Campeonato de Cataluña”, 

El 1924 se creaba ya la Federación Catalana de Bàsquet-Ball.

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